El gasto energético de un hogar representa una parte importante del presupuesto familiar destinado al pago de servicios. Realizar un consumo responsable no sólo ayudará a conservar el medio ambiente evitando la pérdida de recursos; también nos ayudará a reducir significativamente el coste de la factura mensual.
A continuación, te enumeramos unos consejos básicos y de fácil aplicación para que cada persona de la familia aprenda a gestionar de forma eficiente el consumo:
- Apostar por la iluminación y la ventilación natural.
- Aprovechar al máximo las horas de luz natural para evitar el uso de lámparas, bombillos o focos.
- Realizar mantenimiento periódico de los equipos para asegurar un óptimo funcionamiento.
- Lavar la ropa en la lavadora o los platos en el lavavajillas con carga llena.
- Apagar luces o desconectar aparatos cuando no estén en uso para evitar el consumo fantasma.
- Apostar por las nuevas tecnologías. Los electrodomésticos más modernos son más eficientes que los antiguos.
- Instala luces LED en lugar de bombillos incandescentes o fluorescentes.
- Mantener la infraestructura eléctrica del hogar en óptimas condiciones.
- No cargar los teléfonos por más tiempo del recomendado. Desenchufarlos cuando la carga esté completa.
- Emplea sistemas domóticos o apps que permitan tener conectados los aparatos sólo el tiempo necesario para su uso.
- Instala aires acondicionados inverter .
